Cambio de atavío de Nuestra Señora del Carmen

La Santísima Virgen luce saya bordada en técnicas de aplicación de lamé de plata, sobre terciopelo marrón, y manto de brocado blanco y oro. El rostro se enmarca con mantilla de blonda española, quedando cerrada en el centro del pecho, simulando la capucha típica del hábito carmelita.

El Santísimo Niño se presenta con túnica de brocado valenciano color verde manzana con ornamentación en sedas de diversas tonalidades, rematando el bajo con una fakda de encaje Valencienne.

Para terminar, ambas imágenes aparecen enjoyadas con el conjunto de turquesas, además de varios aderezos de brillantes.